El pasado domingo 24 de marzo, Asocastrona junto con algunos vecinos y vecinas de Castronuño celebramos el “I Día del Árbol” que organizamos como asociación, y qué mejor manera de celebrarlo que hacerlo plantando árboles, arbustos y plantas en el entorno de nuestro pueblo.
La jornada comenzó a las 10 de la mañana en el lugar de quedada, La Casa del Parque de Castronuño, donde consensuamos con el Alcalde los lugares de actuación. Decidimos empezar por los lugares más apartados para acabar de regreso en el Parque de La Muela. Así que emprendimos la marcha y nos dimos un paseíto hasta la zona donde estaba el antiguo depósito de agua del municipio. Una vez allí, el objetivo era plantar una caja forestal de pinos piñoneros. Algun@s demostraron tener más destreza que otr@s en el manejo de la azada, lo cual provocó varias bromas y momentos divertidos. Nos organizamos como buen equipo profesional repartiendo las tareas. La mañana auguraba una bonita jornada de convivencia en pro de la concienciación de la importancia de plantar árboles como rico patrimonio natural que heredarán las generaciones venideras, como Alex y Nacho, los niños que nos acompañaron.
De allí caminamos hacia la C/Cascajera, donde plantamos dos filas de abetos intercalados con jara, para después dirigirnos al lugar donde plantaríamos el grueso de las plantas de las que disponíamos, el Parque de la Muela.
Una vez allí, la lluvia nos obligó a hacer una parada técnica en la que muchos aprovechamos para tomar un cafetito reponedor. Tras casi una hora de aguacero, estuvimos a punto de aplazar el resto de la jornada y eso ocasionó alguna baja entre los participantes. Pero un inesperado rayo de sol que anunciaba que el temporal remitía, nos motivó para volver al tajo y por suerte la meteorología nos acompañó durante el resto de la mañana
Las personas que paseaban por allí extrañados por nuestra actividad en una mañana de domingo, se interesaban por lo que estábamos haciendo y mostraban agradecimiento por la labor que estábamos realizando. También les hubo que nos pidieron plantas para ponerlas en la puerta de sus casas. La verdad es que nos sentíamos orgullosos y satisfechos con nosotros mismos porque sabíamos que estábamos haciendo algo que merecía la pena.
Ahora, sólo queda esperar que los árboles y las plantas crezcan sanas y fuertes ayudadas por esta primavera lluviosa que tenemos. Nuestra intención ha sido que los sitios donde actuamos sean gracias a lo plantado unos lugares más acogedores y bellos para el disfrute de tod@s. Como bien decíamos en el cartel que anunciaba esta actividad, los árboles son vida, rodearnos de árboles es rodearnos de vida.